Óscar sigue soñando… tú haces que sea posible
Cada mañana, cuando el reloj marca las 6:30 am, Óscar Marroquín ya está en pie. Con paso firme y una sonrisa, recorre las calles de la ciudad vendiendo piñas dulces. Su jornada puede durar hasta 13 horas, todos los días... excepto los sábados. Ese día